LA ESPECTROFOBIA

La espectrofobia se trata de una de las fobias donde el miedo es irracional y profundo ante las reflexiones o a los espejos, por lo general de la persona que lo padece. Los miedos también están relacionados con un profundo terror hacia los espíritus o los fantasmas. Existen diversas situaciones que pueden desencadenar verdaderos ataques de pánico o síntomas profundos de crisis de ansiedad, si bien es cierto estas situaciones son normales para la mayoría de las personas, no así para las personas que padecen de espectrofobia quienes padecen de profundos temores y una mezcla entre pánico y ansiedad. Dichas situaciones incluyen el lidiar con una situación en la que existe poca iluminación; el estar en un bosque, donde generalmente los síntomas empeoran de noche; pasar mucho tiempo en una habitación sin iluminación; el mirar su propio reflejo en el espejo; la presencia de ruidos fuertes o inesperados; así como el reflejo de otra persona en el espejo. Es de mencionar que se trata de uno de los tipos de fobias en las que el miedo no se incluye a un sólo objeto, ya que también incluye un profundo miedo hacia los espectros, a los fantasmas y a los espíritus. Si no se trata a tiempo los síntomas pueden empeorar con el tiempo, y entonces se ve afectada la salud física y mental de la persona, donde se incluye una reducción de la vida social.

Las causas de la espectrofobia dependen del miedo particular que se relaciona con la fobia. Si la persona sufre de un miedo irracional ante los espejos y la reflexión de su persona, puede tratarse de un temor interno e inconsciente sobre el conocimiento de sí mismo; el miedo inconsciente puede etar relacionado con la crítica personal o el temor a ser exhibicionista. Por otra parte si el miedo irracional está enfocado hacia los espíritus o fantasmas, se puede tratar de un miedo profundo hacia lo desconocido, o bien a una experiencia traumática durante la niñez y que no ha podido ser superada conscientemente. Independientemente de las causas, los que padecen de espectrofobia experimentan síntomas muy parecidos, entre los que se incluyen las náuseas o mareos ante situaciones de estrés, la incapacidad de pensar con claridad o de hablar; un aumento en el ritmo cardíaco, así como de la presión arterial; además esto va acompañado por un impulso primario de la necesidad de huir.